Salsa de tomate casera
La salsa de tomate casera es la salsa es perfecta para aderezar un buen plato de espaguetis, de arroz o para hacer pizzas caseras en cualquier época del año.
El éxito de una buena salsa de tomate depende casi por completo del tipo y el grado de madurez de los tomates que se utilicen, además del método de preparación que se emplee. Si no tienes mucha experiencia, déjate aconsejar por tu frutero de confianza.
Todo lo que necesitamos son unos buenos tomates, mucha albahaca fresca, un poco de tiempo en nuestras manos, ¡y ya está!
Un pequeño truco para hacer una buena salsa de tomate case es comprar los tomates dos o tres días antes de hacer la salsa. Esto es debido a que el propio tomate nos va a decir cuándo es el momento de utilizarlo para hacer la salsa. Ese momento es cuando el pedúnculo esté completamente marchito y se desprenda fácilmente del tomate, será el momento adecuado para hacer la salsa porque el tomate habrá alcanzado su máxima madurez, perdiendo parte del exceso de agua que recibió durante su riego en el campo.
¡Veamos juntos cómo preparar conservas de salsa de tomate casera con tomates frescos!
Ingredientes de la receta
Para preprar Salsa de tomate casera
- Tomates 2.5Kg
- Cebolla 1
- Ajo 2dientes
- Albahaca
- Sal fina
- Azúcar 8g
- Aceite de oliva virgen extra
Prepración de la receta
Como hacer Salsa de tomate casera paso a paso
Preparar los tomates
Para ello hay que quitar los tallos a los tomates y ponerlos en remojo durante unos minutos en abundante agua fría. Una vez ha pasado un tiempo prudencial (4-5 minutos) hay que aclararlos varias veces bajo el grifo para asegurarnos que están bien limpios.
Poner los ingredientes en la olla para cocinar la salsa de tomate
Después de lavar los tomates, es momento de cortarlos en trozos más o menos grandes. Estos trozos de tomate ponlos directamente en una olla grande.
Añadir una cebolla pequeña cortada en rodajas finas, sal al gusto y, si nos gusta acentuar ligeramente el sabor dulce de los tomates, añadir 1 o 2 cucharaditas de azúcar (esta última operación es absolutamente opcional). También hay que añadir algunas hojas de albahaca y 2 dientes de ajo.
Nota: No es necesario retirar las pieles y las semillas.
Cocinar a fuego medio durante 30-40 minutos
Ponemos la olla al fuego y cocinamos los tomates a fuego medio durante unos 30-40 minutos. El tiempo de cocción varía en función de la cantidad de agua que suelten los tomates. Si están especialmente aguados, deberás alargar el tiempo de cocción unos minutos más.
Triturar los tomates
Una vez cocidos los tomates es momento de retirar los dientes de ajo y las hojas de albahaca.
Ahora es el momento de hacer un puré con los tomates, utilizando un molinillo de verduras. Dependiendo de las preferencias, elegimos si utilizamos un disco de orificio ancho, para que la salsa tenga más cuerpo y sea más rústica, o un disco de orificio más estrecho, para obtener una textura suave y aterciopelada.
Nota: la albahaca se vuelve amarga tras una larga cocción y es mejor retirarla y sustituirla por albahaca fresca
Pasar los tomates por el molinillo
Vierte una parte de los tomates en el pasapurés y redúcelos a una salsa. Cuando sólo queden las semillas y las pieles estén secas, es el momento de desechar los restos y filtrar o pasar por el molinillo el tomate restante.
Si el tomate todavía ha producido demasiada agua durante la cocción, en lugar de utilizar un cazo para verterla en el pasapurés, utilizamos una espumadera. De esta manera evitamos sacar demasiada agua que haría la salsa excesivamente líquida
Cocer la salsa de tomate
En el último paso y antes de servir la salsa se tiene poner en una paella y cocer el tomate durante aproximadamente unos 15 minutos. En este punto es importante probar como nos está quedando la salsa por si es necesario corregir el gusto con una pizca de sal.
Cocinamos durante unos 15 minutos. Cuando esté cocido, apaga el fuego y condimente la salsa con un generoso chorro de aceite de oliva virgen extra y unas hojas de albahaca fresca o oregano.
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